Por José Mendoza Jiménez
Tengo un recuerdo grato e inolvidable de mi madre, que cada vez que lo pienso se me eriza la piel y me estremece el alma de alegría, de ver su grandeza ;de lo que una madre es capaz de hacer con tal de hacer realidad los sueños e ilusiones que su hijo abriga en ese momento. Por un error de cálculo, se anticipó la visita del obispo para la confirmación de la primera comunión y, al enterarme que no la recibiría de tan alta jerarquía eclesiástica, por no contar con la vestimenta apropiada, explote en un llanto inagotable que nadie podía remediar y, ante el desespero que causaba mi ilusión interrumpida que por días había alimentado ;mi madre no se cruzó de brazos y sacando fuerzas de donde no las tenía, se medio arregló y se dirigió al pueblo distante de ahí a donde unos familiares, dejándome con mi llanto inconsolable. Al cabo de unas horas regresó con una muda de ropa de color caqui que le había prestado a una de sus hermanas de crianza justo para mi.
Mi madre es hija única. Su mamá, María del Rosario Rada, de un embarazo de mellizos, un varoncito que no alcanzó la vida que junto con su madre muriera después de haber dado luz ¡ellos murieron para que ella viviera y viviera por ellos! Quedó al cuidado y crianza de la difunta Vicenta, tía de su padre Alejandro que junto con su hija María Inocencia a la cual quiso mucho, la sacaron adelante .Con ellas aprendió de todos los quehaceres de una casa y también las primeras letras del abecedario. Siendo muy menor a María Inocencia que tuvo 13 hijos, estos pasaron a ser también sus hermanos de crianza. Dos murieron siendo niños, Georgina por descuido ahogada en un tanque y Camilo de una fiebre alta al lado de su lecho de enfermo una patilla para regalarsela a su profesor ;Doris, Bercelis, Jorgelina, Rosalba, Ángel, Albano, Juan, Walter, Doralba ,Carmen y Ladis, estos últimos seis ya fallecidos. Además de los hermanos por el lado de su padre, Amada, Sindulfo Naum (Recientemente fallecido), Everardo José y Gualberta Fernely a quien siempre hemos conocido como la tía Rubia. Con todos ellos una relación entrañable y fraternal.
Continuará
Comentarios
Publicar un comentario