Por José Mendoza Jiménez
Días antes de las elecciones del pasado 28 de julio en Venezuela, el presidente Nicolás Maduro, teniendo todo planeado junto con el Conejo Nacional Electoral, el Tribunal Supremo de Justicia y sus ministros cómplices; prometió un baño de sangre sino ganaba.A Luiz Inacio Lula da Silva, el presidente de Brasil, el único líder de la región que manifestó su temor por lo expresado por el mandatario,lo mandó a tomar valeriana;lo que quiere decir que poco o nada le interesa lo que digan los demás sobre su gobierno y Venezuela porque el jefe supremo es él y nadie mas.El TSJ, confirmará lo ya dicho por el CNE.
La hipocresía, que es el acto de ignorar las reglas del juego limpio, ha encontrado en otras similitudes con el cual alargar la incógnita del fraude y, darle aire al impostor para que logre su cometido y así perpetuarse en el poder.
El liderazgo que debió atender Colombia en la votación de la OEA, en donde lo que se pedía era que se dieran a conocer las actas de la votación en Venezuela y no una intervención militar en el vecino país, quedó reducida a eso,a un argumento falso: la paz de Colombia.Como si la paz del país dependiera o tuviera que pasar indispensable por Venezuela para ser posible.Cuando lo que se debió de atender , de expresar, fue la solidaridad para con el pueblo venezolano, que fue usurpado en su buena fé de creer -esta vez si -en las reglas del juego limpio, de unas elecciones sin intereses por debajo de la mesa de quienes debían garantizarlas.
Ese es el meollo de todo el problema:desviar la atención hacía lo que no se debe hacer, que ayuda al farsante a salirse con la suya ante la mirada de todos, perpetuandose en el poder por mas tiempo del establecido, trayendo más pobreza en un país rico , que ellos mismos se han encargado de empobrecerlo porque su interés no es el pueblo en si, que dicen defender , al que han puesto a deanbular por la región sin rumbo fijo, buscando mejores oportunidades y calidad de vida que su país no les ha podido ofrecer, nadando en petróleo y otras riquezas.Envidia de los de la región que con su economía del rebusque,ayudan en lo poco que pueden;poniendolos en la encrucijada la inmigración desbordada por culpa de un gobierno que no reconoce su fracaso en el liderazgo de la gobernabilidad del país.Poniendo repito,a los vecinos en una situación incómoda de suplir en todos los casos, sus necesidades primarias en salud, educación y trabajo.
En esas estamos, en esas nos encontramos, cabalgando en la disyuntiva del fracaso, porque somos mas solidarios con un gobierno apático a las reglas de la democracia, que con el pueblo que las acató y que creyó en ellas, la victoria que reclama en las calles, con represión y todo, como lo sabe hacer a la perfección, el régimen con las fuerzas del orden y los comandos armados al margen de la ley y la constitución.
A estas alturas de las elecciones del 28 de julio -como lo han evidenciado todos los medios informáticos -todavia el régimen se niega a dar a conocer las actas de la votación porque simplemente las actas dan como ganador al señor Edmundo González Urrutia, el candidato de la oposición que María Corina Machado, la heroína en ésta ocasión,ha respaldado segura del triunfo por el agotamiento del chavismo que ya nadie quiere por su errática labor al frente de los destinos de la nación.
Desde un principio, el Centro Carter, dió cuenta de las artimañas, de las irregularidades que se fraguaban para darle visos de legalidad al fraude, que no se ajustaban al juego democrático.
Dijo hace poco el presidente Nicolás Maduro ante medios periodísticos que "Esto que había visto nunca lo había habido", refiriéndose a las protestas en las calles.¡Ingenuo!No acepta que su gestión al frente de los destinos de la nación ha sido un completo fracaso, que la gente ya se cansó de sus promesas incumplidas.No acepta que todo cambió, que ya nada es igual a cuando empezó.Que hoy tiene el viento en contra.No acepta que es el autor de su propia hecatombe.Sobre su reticencia a dar a conocer los resultados de la votación,lo atribuye al hackeo que se inventó desde antes con antes para torpedear y no reconocer el triunfo seguro de la oposición,¡El arte de maquillar la mentira como verdad!
Señor Nicolás Maduro, deja de inventar películas de terror que no tengas que ver en tu televisor.No le inflinjas mas dolor y sufrimiento a tu pueblo que no se lo merece.Las sanciones te castigan y te aíslan para que entiendas que las reglas del juego limpio deben ser claras.Desafortunadamente en estos casos, el pueblo también lleva del bulto y, por mucho que quieras trabajar por él, nada vas a lograr que hasta lo que ahora haz logrado: una diáspora sin precedentes en el continente que no puedes ignorar a quién se debe ,pese a tus actitudes actorales y cómicas.Tu liderazgo quedó atrapado en el deseo de hacer de Venezuela un país mejor, pero los hechos te dicen lo contrario.Si tanto quieres a tu pueblo,liberalo de tu yugo, para que finalmente encuentre el camino de la recuperación, la prosperidad y el progreso.Contigo ahí este cambio no se podrá dar porque estás maniatado para hacerlo.Y no se trata de ver quién resistirá más si tú o el pueblo, desde luego que tú con la represión.Pero ésa no es la lógica de la razón cuando está de por medio la suerte de un país, de tanta gente que espera una vida mejor en medio de tanta riqueza que tú no podrás darles ni si así lo quisieras.
Comentarios
Publicar un comentario